El amor de Dios
«… manténganse en el amor de Dios...»
—Judas 1:21
La Biblia es la revelación de que Dios es amor. Sin embargo, muchas personas malinterpretan el amor como atributo de la naturaleza de Dios. «Dios es amor» no significa que todo en el mundo es agradable, hermoso y feliz; tampoco significa que el amor de Dios no permita el castigo por el pecado.
Cuando predicamos la justicia, es la justicia atemperada por el amor. Cuando predicamos la rectitud, es rectitud fundada en el amor. Cuando predicamos la expiación, es una expiación planeada, proporcionada, otorgada, terminada y necesaria por el amor. Cuando predicamos la resurrección de Cristo, estamos predicando el milagro del amor. Cuando predicamos el regreso de Cristo, estamos predicando el cumplimiento del amor.
No importa qué pecado hayas cometido o cuán terrible, sucio o vergonzoso haya sido, Dios te ama. Dios te ama tanto que envió a su Hijo a morir por ti para que puedas tener una relación con Él. ¡Este amor de Dios es inmensurable, irrefutable e infinito!
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Oración de hoy
Muchas gracias Padre, por tu amor y perdón. Debo ser plenamente consciente de que en todas mis relaciones con los demás, la única medida que tengo es tu amor inmensurable.