«En cuanto a mí, jamás se me ocurra jactarme de otra cosa sino de la cruz de nuestro Señor Jesucristo…». —Gálatas 6:14, NTV
¿Qué gloria hay en la cruz? Era un instrumento de tortura y vergüenza. ¿Por qué Pablo dijo que se gloriaba en ella? Se glorió en la cruz porque en ella se llevó a cabo el acto más desinteresado que jamás se haya realizado. Pablo vio que, de esa viga áspera y espantosa sobre la que el Hijo de Dios fue crucificado, emanaba la esperanza resplandeciente del mundo, el fin de la esclavitud del creyente al pecado y el amor de Dios derramado en los corazones de los seres humanos.
Un hombre solo y moribundo en una cruz hizo más para restaurar la armonía del ser humano con Dios, con su semejante y consigo mismo, que la combinación de todos los grandes poderes e ingenios de la tierra. Con mis limitaciones finitas, no puedo comprender del todo el misterio de la expiación de Cristo.
Solo sé que todos los que acuden a la Cruz con una fe sencilla y confiada serán limpiados de toda culpa y encontrarán la paz con Dios.
Como el apóstol Pablo, Padre, ayúdame a gloriarme en la cruz de Jesús y a entender más plenamente el gran significado que tiene para mí como creyente y para todos aquellos que quieren ir y postrarse al pie de la cruz.