La evidencia de Jesús
Y el que vive. Estuve muerto, pero ahora vivo por los siglos de los siglos…
—Apocalipsis 1:18
Algunas leyes de evidencia se sostienen para el establecimiento de todo suceso histórico. La documentación del acontecimiento tiene que realizarse por testigos contemporáneos confiables. Existen más pruebas de que Jesús resucitó de los muertos de lo que existen de la existencia de Julio César o de que Alejandro Magno muriera a los 33 años. Es extraño que los historiadores acepten miles de hechos, pero que no puedan aportar la más mínima evidencia de ellos. Sin embargo, en vista de las pruebas contundentes de la resurrección de Jesucristo, son escépticos y tienen dudas intelectuales. El problema que tienen muchas personas es que no quieren creer. Son totalmente prejuiciosos y no pueden aceptar el glorioso hecho de la resurrección de Cristo solo basado en el testimonio bíblico.
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Oración de hoy
Señor Jesús, sé que estás vivo, ¡porque vives en el corazón de todos los que te aman!