«Destruimos argumentos (…) y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo». —2 Corintios 10:5
Miles de personas han hecho planes para escapar de las realidades de la vida. Una palabra nueva ha llegado a ser de uso común en los últimos años. La palabra es «escapismo». El diccionario lo define como «actitud de quien se evade o huye mentalmente de la realidad». El escape de la imaginación. Salomón habló del corazón no regenerado como aquel que es proclive a la fantasía excesiva. El mundo de fantasía que Satanás siempre promueve termina en la desilusión. Miles de personas viven en un mundo irreal de fantasía mientras eluden sus responsabilidades hacia sus familias y hacia Dios. La Biblia enseña que, cuando Cristo está en tu corazón, puedes enfrentar las realidades de la vida. Aunque sean difíciles, la gracia de Dios te dará mayor alegría y placer que cualquier mundo de ensueño al que trates de escapar.