No te preocupes
«Que habite en ustedes la palabra de Cristo con toda su riqueza: instrúyanse y aconséjense unos a otros con toda sabiduría; canten salmos, himnos y canciones espirituales a Dios, con gratitud de corazón».
—Colosenses 3:16
Los cristianos debemos regocijarnos. Para eso, solo necesitamos pensar en las grandes cosas que Dios ha hecho por nosotros. La Biblia nos dice que no nos preocupemos, sino que, en nuestras oraciones, hagamos conocer nuestras peticiones a Dios. En tus problemas más grandes, tienes a alguien a quien puedes acudir; y ante Él, tú puedes derramar tu corazón con la seguridad de que Él te dará una respuesta para ese gran problema. Luego debemos llenar nuestras mentes de aquellas cosas que son buenas. Estas se mencionan en las Sagradas Escrituras como cosas que son verdaderas, dignas, justas, puras, agradables, de buena reputación y de virtud. En estas cosas debemos pensar. Vivir de manera positiva, no negativa. Una vez que aprendas ese secreto, sabrás que Dios te ha dado la victoria.
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Oración de hoy
Tú sabes lo que me preocupa hoy, Señor Jesús. Con fe, te lo entrego todo a ti y ahora te alabo al saber que tu amor no fallará.