«¿Qué es su vida? Ustedes son como la niebla, que aparece por un momento y luego se desvanece». —Santiago 4:14
Nada toma a Dios por sorpresa. Todo se mueve de acuerdo con un plan y Dios te quiere en ese plan. El diablo también tiene un plan para el mundo. Dios tiene un plan y el diablo tiene un plan, y tendrás que decidir a cuál de ellos vas a pertenecer. La Escritura afirma que Dios nos permite 70 años y unos cuantos más. Los primeros 15 años los vivimos en la niñez y la adolescencia temprana. Pasamos 20 años en la cama y, durante los últimos 5 años, las limitaciones físicas comienzan a reducir nuestras actividades. Eso nos da casi 30 años en los que vivimos como adultos. Todos tomamos tiempo libre para comer y para calcular nuestros impuestos, así que nos quedan quizás 15 años. Ahora supongamos que pasamos siete de esos años mirando la televisión: eso nos reduciría a siete u ocho años de tiempo disponible. ¡Nuestro tiempo es corto! El tiempo que podemos invertir para Dios haciendo cosas creativas para alcanzar a nuestros semejantes para Cristo, ¡es realmente corto!
Cada hora de cada día que queda de esta vida terrenal, la pasaría sirviéndote a ti, Señor Jesús. Perdona el tiempo que tantas veces he invertido en proyectos innecesarios.