Después de que el número de muertes causadas por los incendios forestales de California alcanzara los 29 y los daños superaran los 250 000 millones de dólares (USD), la esperanza escasea en la zona de Los Ángeles.
Pero el lunes, Franklin Graham se reunió con los propietarios de viviendas para conversar, orar con ellos y animarlos en estos días oscuros. Decenas de capellanes han orado con miles de personas de la región en respuesta a esta tragedia.
«Nuestros capellanes del Billy Graham Rapid Response Team están sobre el terreno ministrando a los residentes, a los bomberos y a toda la comunidad. Oren por estas familias», dijo Franklin Graham en Facebook el lunes. «Todavía no hay electricidad ni agua en gran parte de la zona afectada por el incendio de Pacific Palisades».
Graham se reunió con residentes de dos de las zonas más dañadas, una dura experiencia que le permitió ver parte de lo poco que queda en pie realmente.
«Es difícil imaginar lo rápido que las llamas envolvieron estas comunidades. Las imágenes simplemente no pueden comunicar adecuadamente la magnitud de la destrucción», dijo Franklin Graham.
«Hoy he estado en las zonas afectadas por los incendios de Eaton y Pacific Palisades, en California. Casa tras casa, calle tras calle, milla tras milla de cenizas, con solo unas pocas chimeneas o restos carbonizados aún en pie».
Graham conoció a una propietaria de Eaton Canyon que estaba llena de gratitud. Los voluntarios de Samaritan’s Purse la habían ayudado a cribar entre las cenizas para encontrar objetos de gran valor personal, entre ellos algunas joyas y recuerdos de su boda.
«Siento mucho tu pérdida. Pasate por algo realmente muy duro. Es un honor conocerte», dijo Graham, quien luego oró por ella. «Padre Celestial, a veces no sabemos cómo orar, pero miramos esta casa y pedimos esperanza y consuelo para esta familia».