Poco después de orar y de una reunión matutina con el equipo, Rand Bowman recibió un mensaje importante.
Rand es uno de los capellanes que está ofreciendo atención emocional y espiritual en Poplar Bluff, Missouri, y esa mañana, un voluntario del ministerio hermano Samaritan’s Purse le pidió que él y su equipo acudieran en cuanto pudieran.
Kevin*, un propietario al que estaban ayudando, había mencionado que tenía cáncer y que se encontraba en un estado de importante angustia emocional tras su experiencia durante los tornados.
Los feroces vientos habían derribado un árbol sobre la casa de Kevin, y la habían partido por la mitad. Desde entonces, su vecina, Annie*, había permitido que Kevin y su esposa, Suzanne*, se quedaran en su casa.
Cuando Rand llegó a visitarlos, Kevin le contó cómo él y Suzanne se acurrucaron en el cuarto de baño para resguardarse durante la tormenta, y de pronto escucharon cómo el árbol partía su casa. Tenían miedo de morir.
«Estaba aturdido, pero encantado de que [yo] estuviera allí para consolarlo y simplemente dejarlo hablar», dijo Rand.
Suzanne salió de la casa de Annie y se unió a la conversación en el pórtico.
«Hablamos de la ”tormenta antes de la tormenta”. La batalla [de Kevin] contra el cáncer de páncreas durante los últimos cuatro años ya les había pasado factura», dijo Rand.
«Cuando la conversación llegó a los asuntos espirituales, quedó claro que, aunque creían en Dios, nunca habían dado el paso de pedirle perdón por sus pecados, ni habían estado dispuestos a ceder el control que nunca habían tenido realmente, a Alguien a quien no conocían realmente, Jesús».
Rand les explicó a Kevin y Suzanne cómo podían saber con certeza que sus pecados habían sido perdonados y cómo podían iniciar ese mismo día una relación personal con Cristo.
«Hubo lágrimas», dijo el capellán al describir la respuesta de la pareja al mensaje del Evangelio. «Estaban ansiosos por confesar sus pecados y por orar una oración sincera, y expresaron que anhelaban ser guiados por Aquel que realmente tiene el control…
»Cuando te cae un árbol sobre la casa, te das cuenta enseguida de que nunca tuviste el control».
Antes de dejar a la pareja, Rand observó que su semblante parecía muy distinto al que tenían cuando se conocieron.
«Verlos gozosos en su nueva esperanza aún mientras estaban sentados viendo cómo demolían su casa fue una experiencia muy conmovedora», dijo.
Al día siguiente, cuando Rand volvió para darle seguimiento de la pareja, estaban ansiosos por presentarle a Annie. Anhelaban que ella también pudiera oír hablar de la esperanza del Evangelio.
Annie, que no era ajena al sufrimiento, se sinceró sobre las pérdidas que había sufrido en el pasado, como la muerte de dos esposos y de sus hijas gemelas.
Siguieron hablando y Rand le preguntó si sabía si algún día ella iría al cielo. Ella no estaba segura, pero le interesaba saber más. Rand le compartió el pasaje bíblico de Romanos 10:13, según el cual «todo el que invoque el nombre del Señor será salvo».
Annie preguntó qué significaba «invocar el nombre del Señor», así que Rand la guió a través de los «Pasos hacia la paz con Dios», un pequeño folleto que contiene la sencilla verdad de cómo conocer a Dios personalmente.
Ella agradeció la explicación y reconoció inmediatamente que necesitaba entregarle su vida a Jesús.
Antes de marcharse aquel día, Rand y el equipo le entregaron una Biblia gratuita, que incluye una sección especial de preguntas frecuentes relacionadas con la fe.
«Estaba ansiosa por repasar las preguntas más frecuentes», dijo.
Más tarde, reflexionó sobre la vida de Annie y la serie de experiencias difíciles que finalmente la llevaron a depositar su confianza en Cristo.
«Seguramente las crisis de [haber perdido a] sus seres queridos fueron suficiente aflicción en su vida [como para poner al descubierto su necesidad]», añadió Rand. «El Espíritu de Dios se movía en su corazón».
¿Te unirías a nosotros en oración por todos los afligidos por las recientes tormentas? Ora para que experimenten la cercanía y el consuelo de Dios mientras los capellanes comparten la paz que solo Él puede proporcionar.
*Nombres cambiados por privacidad.