Al comienzo de cada año, el pastor Daniel Chiniec aparta un tiempo para el ayuno y la oración en el que espera escuchar cómo el Espíritu Santo guiará a su iglesia ese año.
En enero de 2020, Dios lo guió a él y a su iglesia, Conexión con Dios de Buenos Aires, Argentina, a orar y ayunar fervientemente porque se acercaba una época difícil. Poco después, una pandemia mundial trajo más pruebas de las que jamás imaginaron.
Cinco años después, en enero de este año, sintió claramente que el enfoque de 2025 estaría en la evangelización.
En las semanas siguientes, se enteró de que muchas iglesias locales estaban trabajando juntas para traer a su ciudad una campaña evangelística con Franklin Graham. Él y los miembros de su iglesia se alegraron, pues sus corazones ya estaban preparados para unir fuerzas en esta proclamación del Evangelio a gran escala.

El 15 de marzo, Daniel Chiniec y 2200 pastores de más de 1200 iglesias locales lanzaron oficialmente Esperanza Buenos Aires, un alcance de dos noches que tendrá lugar los días 7 y 8 de noviembre.
«Aquí, en el lanzamiento, pudimos sentir el entusiasmo y la emoción de los pastores», dijo Chris Swanson, Director del Festival. «Las iglesias llevan muchos años orando por esto, y estamos viendo un mover histórico hacia la unidad entre las iglesias».
Aunque la iglesia evangélica de Argentina ha sido en diferentes ocasiones un faro de luz para América del Sur, los pastores locales coinciden en que la iglesia necesita despertar para ver que los campos están listos para la cosecha. Creen que este evento evangelístico motivará a las iglesias a trabajar juntas para el avance del reino de Dios.
«Desde la Alianza de Iglesias Evangélicas Argentinas (ACIERA) vimos la gran oportunidad que representa Esperanza Buenos Aires para el despertar y el avivamiento de las iglesias», dijo Christian Hooft, presidente de ACIERA. «Se trata de una oportunidad única para compartir las Buenas Nuevas del Evangelio con toda la sociedad. Argentina necesita un mensaje de esperanza, un mensaje de fe que llegue a tocar la vida de las familias y de las personas».

En el área metropolitana de Buenos Aires viven más de 15 millones de personas; sin embargo, la mayoría de ellas no tiene una relación personal con Jesucristo.
Los pastores argentinos quieren ver una profunda transformación en su país que cree un cambio cultural hacia una cosmovisión más bíblica. Y saben que el Evangelio de Jesucristo tiene el poder para lograr eso y mucho más.
«Buenos Aires es muy compleja, y nuestra cultura necesita ser redimida de muchas maneras», dijo Amilcar Matosián, líder ejecutivo del Consejo de Pastores de la Ciudad de Buenos Aires. «Pero una vez que se produce un cambio cultural en Argentina, impacta en todo. Y se reflejaría no solo en el país, sino en toda Sudamérica».
Hooft, que ha estado trabajando para fomentar la unidad entre las iglesias evangélicas, cree que Esperanza Buenos Aires impulsará los esfuerzos que se han ido produciendo lentamente en las últimas décadas.
«Ésta es una oportunidad única para que la iglesia haga realidad el mensaje de Jesús cuando dice: “Que sean uno, para que el mundo crea”», dijo Hooft, en referencia a Juan 17:21.

El pastor Chiniec está convencido de que esta campaña evangelística ha sido preparada por Dios para producir una gran cosecha en la región.
«Esta es una de esas ocasiones en las que el Espíritu Santo guía nuestros pasos y dice: “Es el momento adecuado, con las personas adecuadas, con el objetivo adecuado”. Cuando esas tres cosas se alinean, es un gozo participar y ver lo que Dios está haciendo», compartió.
Matosián espera que Esperanza Buenos Aires tenga un impacto duradero en la ciudad donde nació y por la que ha caminado desde hace 40 años.
«Sueño con que la gente escuche mientras predicamos que el pecado no es el fin, sino que admitir nuestro pecado es apenas el principio para acercarnos a Dios».
«Ahora tenemos que unirnos en oración», añadió Chiniec. «Tenemos que orar con fe, sabiendo que si pedimos, Dios responde según su voluntad. Y su voluntad es que muchos se salven en Buenos Aires».
¿Te unirías a nosotros en oración para que las iglesias de Argentina sean audaces al proclamar las Buenas Nuevas de Jesucristo con su prójimo, y para que el Festival Esperanza Buenos Aires traiga una cosecha abundante?

