Un soplo de restauración llegó a los Llanos de Venezuela

San Fernando de Apure se vistió de alegría cuando más de cuarenta mil personas escucharon la predicación de las Buenas Nuevas.

En la ciudad de San Fernando de Apure casi nunca tienen lugar eventos masivos. Ubicada en el centro de los Llanos de Venezuela, la mayoría de sus pacíficos habitantes se dedican a la ganadería y la agricultura. 

Sin embargo, tanto quienes habitan en agitadas ciudades, como quienes viven en las tranquilas llanuras, sufren las consecuencias de vivir en un mundo caído y tienen la misma necesidad de reconciliarse con Dios por medio del Evangelio de Jesucristo. 

El fin de semana del 18 al 20 de noviembre, 46 500 personas —la sexta parte de la población total de la ciudad— escucharon la clara proclamación de este mensaje de vida y esperanza en el Festival de la Familia que fue celebrado en el estadio del Polideportivo de San Fernando de Apure. 

Los asistentes disfrutaron de tres días de Festival, y un total de 7951 reportaron haber rendido sus vidas a los pies de Cristo.

«Nunca en toda mi vida había vivido algo como esto en Apure», comentó Marcos* con una gran sonrisa, uno de los jóvenes que participó en el evento. «Este festival marcó el comienzo del avivamiento en mi tierra».

Un total de 337 iglesias de diversas denominaciones unieron esfuerzos con el Consejo Evangélico de Venezuela e invitaron a David Ruíz, evangelista asociado de la Billy Graham Evangelistic Association y a los pastores Hugo Sánchez de Uruguay y Elías Betanzos de México a liderar la predicación del Evangelio.

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Incluso las Iglesias Nativas de Apure, una de las denominaciones más antiguas de la región y que tradicionalmente no había participado en eventos multidenominacionales, sumó sus fuerzas a fin de alcanzar a su comunidad con el mensaje de Salvación, llenando de alegría el corazón de todos sus hermanos en Cristo. 

Alegre música de adoración y alabanza preparó los corazones para recibir la Palabra. Las bandas musicales Israel García de México, Pescao Vivo de Colombia, Jahaziel Band de Venezuela y Samuel Lima de Brasil hicieron saltar de júbilo a los miles que cada noche asistieron al estadio.

«Como nunca antes el Consejo Evangélico se siente honrado de servir de plataforma para la realización del Festival de la Familia junto a las iglesias del estado de Apure», comentó el pastor César Mermejo, Presidente del Consejo Evangélico de Venezuela.

Festikids

Dentro del marco de la celebración del Festival de la Familia, más de 18 000 niños participaron en el FestiKids, un evento diseñado específicamente para los más jóvenes con vibrantes coreografías al ritmo de la música, y una obra de teatro musical llamada «Jesús al Rescate», la cual presenta el Evangelio comenzando desde el libro de Génesis. 

Cientos de voluntarios hicieron posible el Festikids y mostraron el amor de Cristo en sus sonrisas.

Los niños observaron, con rostros llenos de sorpresa, los musicales y coreografías que Dios usó para atraer sus pequeños corazones. 

Un total de 5696 niños indicaron haber orado para recibir a Cristo en su corazón y se acercaron al frente para que los voluntarios oraran con ellos.

De la calle a los brazos de Cristo

Leilani, una de las voluntarias, notó que un pequeñito había levantado la mano para indicar que había hecho la oración, pero se había quedado parado a la orilla, temeroso de acercarse.  Al caminar hacia él, ella notó que su ropa estaba sucia y desgastada. 

«Entonces me le acerqué y comencé a hablar con él», comentó Leilani. «Me dijo que no tenía ni mamá ni papá. Él es un niño de la calle que, al escuchar las alabanzas y ver la actividad, entró al estadio. 

Este pequeñito recibió el mensaje de Salvación. Únete a nosotros en oración para que la semilla plantada en su corazón rinda fruto y continúe asistiendo a su iglesia local.

»Yo le dije que si Dios permitió que Él estuviese ahí era para mostrarle un futuro mejor. Y lo invité a que pasara más tiempo en la iglesia más cercana a la zona donde él vive, que es la Iglesia Dios con Nosotros». 

Pinto pudo testificar cómo el rostro del niño cambió al recibir el amor de Cristo y al sentir físicamente el amor de su Iglesia.

«Al ver que era tomado en cuenta, al sentir a otros creyentes orar por él y abrazarlo, pude ver en su cara la alegría por todo lo que recibió esta noche».

David Ruíz, evangelista asociado de la Billy Graham Evangelistic Association, proclamó fielmente el Evangelio.

¡Algo en mí cambió!

El domingo posterior al festival, Nohelia acudió a su iglesia como de costumbre. Sin embargo, se encontró con que casi 100 personas nuevas habían asistido al servicio. Eran aquellos que habían recibido a Cristo una semana antes.

Los nuevos convertidos tuvieron la oportunidad de compartir sus testimonios, y Nohelia pudo escuchar el poderoso testimonio de Lorena*, una mujer que fue al festival a escondidas de su esposo, puesto que él es musulmán y ella no sabía cómo respondería al enterarse de que ella quería asistir.

«Ella comentó que había buscado la felicidad en cosas materiales y en fiestas, pero jamás la encontró», dijo Nohelia. «En el evento, ella fue tocada por el Espíritu Santo y se entregó al Señor. Ella estaba preocupada por no saber cómo le diría a su esposo, pero dijo que su vida había cambiado totalmente». 

El gozo de Lorena y la alegría en su rostro era tan grande que contagió a toda la congregación, quienes lloraron y alabaron a Dios junto con ella.

«¡Algo en mí cambió! ¡Quisiera decírselo a todo el mundo!», compartió Lorena con la iglesia, llena de emoción y alegría. 

«Puedo testificar que Jesús sí transforma la vida de las personas». 

En preparación para el Festival

Para Danny Pastrán, conocer a su hermano en la conferencia de pastores Fidelidad Eterna fue un innegable milagro.

Antes del Festival, el 16 de noviembre tuvo lugar la conferencia pastoral Fidelidad Eterna y, al día siguiente, 981 jóvenes participaron de la conferencia para hijos de pastores.

Un total de 1994 pastores y esposa de pastores de la región fueron ministrados en la conferencia pastoral, en la que recibieron el llamado a reafirmar su compromiso de mantenerse fieles a su llamado a pesar de las dificultades.

Danny Pastrán sirve como pastor en el municipio de Camaguán y acudió a la conferencia Fidelidad Eterna emocionado, esperando recibir sólida formación pastoral. 

Sin embargo, Dios tenía un plan aún mayor. 

En el evento, Pastrán comenzó a conversar con otro pastor. Durante la conversación, comenzaron a notar cómo sus vidas tenían varias e innegables similitudes, hasta que, atónitos, ambos pastores descubrieron ser hermanos de sangre por parte de su padre, sin haber sabido el uno del otro hasta entonces. 

«Dios eligió este evento para darnos el hermoso regalo de poder encontrarnos», comentó Pastrán. 

Los hermanos se abrazaron y lloraron juntos por largo rato, sorprendidos de cómo, a pesar del difícil pasado de su familia, Dios los llamó a ambos al ministerio pastoral. 

«No tengo palabras, pero creo que este es un testimonio más de lo Dios hace por su pueblo», dijo Pastrán. 

*Nombres cambiados por privacidad.